Un remolino en el medio del mar
Sinopsis
Diversos paisajes sonoros y de movimiento conforman las escenas de un relato. Esta propuesta reconoce una poética vinculada al sentido del amor, a su forma, su transformación; a los múltiples sentidos que le pueden dar significancia a la vida de cada ser humano en relación con otros. Entrenamos la fisicalidad con esa esencia poética y narrativa: la fisicalidad del amor.
En los personajes vive la danza, el movimiento imperceptible a los ojos del mundo.
Movimiento cósmico. Dolor y fuego vivo de seres fantásticos. Dispuestos en línea juegan con el peso de su cuerpo y la suspensión.
Abandonamos el ser existente, el original, el dado por la naturaleza de la vida, y
construimos otro más complejo, con el paso del tiempo de nuestra propia historia, de los desvelos, los encuentros, las ausencias. Aparece el grupo, formado de cuerpos que se complementan y forman una estructura de locomoción; un tren; un animal.
Un ser fantástico de carne y hueso conformado por muchos cuerpos. Un centauro, una quimera, un semidiós con manos hechas de pies. Ser inconstante y difuso, inacabado, incompleto, ansioso de completitud desconocida, anárquica y absoluta. Con la fuerza del aire, respira la espera.
¿Cómo se ensamblan estas partes de amor que nos reconstruyen metafóricamente? Cómo cuaja en un cuerpo fantástico de carne y hueso?
Se encastran, encajan, acoplan, copulan.
Huyen…
¿Cuántos siglos de amor guarda en su memoria de agua?
Una sirena solitaria en un remolino en el medio del mar.
Ya no hay espera, porque no hay tiempo. No hay tiempo físico, lineal, no hay tiempo real.
Varias manos y varios rostros sumergidos en la marea vertiginosa.
Pies de muchos rostros sostienen el cuerpo fluido y sólido de la manada.
Participaciones en Festivales
Participantes
Funciones Especiales
Más sobre la obra